Que el quiromasaje, y en general las terapias generales, no estén reguladas significa que nadie dice a las escuelas y academias de masaje cómo tiene que hacer las cosas:
- qué enseñar
- cómo enseñarlo
- cuánto deben durar los cursos
Esto implica que cada academia de masaje enseñe las técnicas de tratamiento como mejor le parece.
Y en muchas ocasiones en las escuelas no se hace el ejercicio de pensar si están enseñando de modo que resulte más intuitivo, más sencillo, para que los conocimientos prácticos que se adquieren durante el curso duren el mayor tiempo posible, a poder ser, para siempre.
Así, se tiende a hacer algo que requiere mucho menos esfuerzo: enseñar como te han enseñado a ti.
Pero que te hayan enseñado de cierta manera no quiere decir que ese sea el mejor modo de hacerlo…
¿Cómo se suele enseñar masaje?
Así: pasas unas semanas, o meses, estudiando el masaje relajante, después el terapéutico, después el deportivo, después el anticelulítico…
Esta es la manera como más se enseña masaje, y para mí es el modo de APRENDER MASAJE SUFRIENDO.
¿Por qué?
Porque si tienes que aprender, pongamos, 6 tipos de masaje, y tienes un listado de maniobras para cada parte del cuerpo, y son 14 las partes del cuerpo que te deberían enseñar (piernas y glúteos, manos, brazos, cara, cráneo, espalda, lumnares, columna, cintura escapular y cuello, abdomen, tórax), tendrías esto:
12 zonas de tratamiento x 6 tipos de masajes = 72 listados de maniobras
¡72 listados diferentes de maniobras!
¿Crees que alguien es capaz de aprendérselos?
Puede que sí, pero ya te digo que YO NO, y la mayoría de la gente tampoco.
¿Pretenden las escuelas de masaje que te aprendas 72 listados de maniobras diferentes?
Tampoco.
¿Por qué?
Porque es IMPOSIBLE.
¿Cómo lo solucionan?
De dos maneras:
- reduciendo el número de zonas de tratamiento (y si quieres aprender masaje específico de una zona como las lumbares, pagas un curso a parte o un segundo nivel de quiromasaje)
- reduciendo el número de maniobras y eliminando todas las maniobras específicas de zona (te queda una lista de muy pocas maniobras que puedas recordar porque vas a hacer las mismas en todo el cuerpo)
Esto hace que no tengas las suficientes herramientas para solucionar los problemas de tus clientes, que es el principal objetivo que debes tener en mente.
¿Y a qué te obliga?
- A pagar un segundo nivel
- A pagar cursos de especialización
- A perder tu tiempo y tu dinero…
- …porque te lo podrían haber contado bien desde el principio
Y si así no se estudia quiromasaje…
Lo primero: conocer el objetivo del tratamiento
Lo más importante a la hora de plantearnos qué vamos a hacer en determinado tratamiento es saber su objetivo final.
Y para ello se suele recurrir a “encasillar” al tratamiento en uno de estos tipos:
- masaje relajante
- masaje terapéutico / masaje descontracturante / masaje contra dolores / masaje para dolores
- masaje deportivo de preparación
- masaje deportivo de recuperación
- masaje anticelulítico
- masaje drenante / masaje circulatorio
Como puedes ver, el objetivo final de cada uno de los tratamientos es muy diferente al de los otros, y el tener diferente objetivo hace que los tratamientos sean totalmente diferentes:
- diferente duración
- diferente velocidad de las maniobras
- diferente presión
- diferentes maniobras
Así, como ves, saber qué tipo de tratamiento es el que vas a tener que hacer va a ser determinante en todos los aspectos del tratamiento.
Tan importante es conocer las maniobras del masaje como las fases del tratamiento
Una vez sabes qué es lo que quieres conseguir con el tratamiento, debes pensar cómo van a ser las diferentes fases del mismo.
En general existen 5 fases en cualquier tratamiento:
- calentamiento
- trabajo muscular
- vaciajes
- estiramientos
- despedida
En cada una de estas fases el objetivo es totalmente diferente, y es necesario conocerlas, entenderlas y ver si nos interesan más o menos para cumplir los objetivos que nos hemos marcado con el tratamiento.
Normalmente las fases del masaje no se repiten a lo largo del tratamiento: empiezas por el calentamiento, lo acabas y ya no lo vuelves a hacer, sigues con el trabajo muscular, lo acabas y no sigues con él en otro momento del tratamiento… y así sucesivamente.
Son excepciones los vaciajes, ya que dependiendo del tratamiento necesitaremos quizás incidir más en los vaciajes para ayudar a evacuar líquidos, sobrecargas, sustancias tóxicas, grasas… así que es normal intercalar maniobras de vaciajes en tratamientos como los anticelulíticos, los descontracturantes, los deportivos de recuperación o los drenantes.
Caso a parte es el del tratamiento anticelulítico, en el que estamos constantemente intercalando las tres primeras fases.
Además, no en todos los tratamientos aplicamos todas las fases que hemos comentado. En el anticelulítico o en el drenante, por ejemplo, no tiene sentido realizar estiramientos musculares, y en el deportivo de preparación, si es inmediatamente antes de la actividad deportiva, podríamos reducir el tratamiento al calentamiento y a la despedida.
¿Cuál es la mejor manera de aprender las técnicas de quiromasaje?
La mejor manera de aprender masaje es LA LISTA ÚNICA.
Con la lista única podrás:
- aprender muchas más maniobras de masaje
- aprender técnicas de masaje para todo el cuerpo
- aprender técnicas de masaje específicas para determinadas zonas del cuerpo
- aprender maniobras de masaje específicas dependiendo del tratamiento
- comprender el objetivo del tratamiento que vas a aplicar
- saber instantáneamente, sin necesidad de estudiarte enésimas listas de maniobras, qué tienes que hacer en cada situación
Y esto último es lo más importante: SABRÁS QUÉ HACER EN TODO MOMENTO.
Esto quiere decir que serás capaz de adaptar el tratamiento a los objetivos y circunstancias de cada uno de tus clientes.
Significa que entiendes a la perfección las técnicas de masaje y cómo aplicarlas.
Es lo mismo que decir que dominas completamente la masoterapia.
Con una lista única de maniobras tendrás un listado único para cada zona del cuerpo.
Algunas maniobras se repiten en las diferentes zonas. Son las maniobras básicas como palmodigital, amasamiento, digital, nudillar, las remociones pulgares o la pinza rodada.
Otras maniobras son específicas de cada zona, ya que masajear una espalda es muy diferente a tratar el cráneo o un pie.
El tener que estudiar sólo una lista única de maniobras te permite estudiar más maniobras y así tener más herramientas para tratar a tus clientes.
Conocerás mejor las maniobras, para qué sirven, si son más o menos profundas, si vacían, calientan, relajan, dispersan el calor, si son más o menos hirientes… y por supuesto sabrás cuándo aplicarlas, con qué presión, con qué velocidad, y, lo más importante, sabrás por qué la estarás aplicando.
La receta del tratamiento: tipo de tratamiento + fases del masaje + maniobras de masaje
Una vez entenedemos a la perfección el tipo de tratamiento, hemos decidido qué fases nos interesan más y menos, y conocemos a la perfección las maniobras de tratamiento, seremos capaces de diseñar un tratamiento sabiendo a la perfección qué vamos a hacer.
Vamos a un caso práctico: un masaje relajante.
¿Tenemos que hacer calentamiento en el masaje relajante?
Tal y como indica su nombre, el calentamiento es la fase del tratamiento en el que buscamos calentar el tejido y prepararlo para las maniobras que vienen después, las del trabajo muscular, que es la fase que más tiempo ocupa del tratamiento y en la que vamos a realizar las maniobras específicas del tipo de masaje que estemos realizando.
Además de para simplemente aumentar la temperatura de los tejidos, el calentamiento sirve también para esparcir o distribuir el aceite o crema por la zona de tratamiento y, lo que resulta incluso más importante, constituye el primer momento de contacto con nuestro cliente, que debe acostumbrarse a nuestro tacto para conseguir que confíe en nosotros y que su musculatura esté lo más relajada posible, consiguiendo así que las maniobras de masaje sean mucho más penetrantes.
Así pues, si estamos haciendo un masaje relajante, ¿es importante hacer un buen calentamiento? Sabiendo que las maniobras de calentamiento pueden ser largas, pausadas, con mucha superficie aplicada, con presión media, es evidente que el calentamiento es una fase importante en el masaje relajante.
Otro caso práctico: masaje deportivo de recuperación inmediatamente tras finalizar la actividad deportiva.
Cuando tratamos, por ejemplo, a un triatleta que acaba de llegar a la meta, ¿hay que hacer calentamiento?
Piensa: ¿crees que es importante que sus músculos estén calientes?
Evidentemente, los músculos del deportista vendrán ya muy calientes y muy irrigados, así que el calentamiento, en este caso concreto, sirve para repartir bien la crema y el aceite, pero no es necesario incidir mucho en él ya que los tejidos están ya a la temperatura adecuada.
Y otro más: masaje anticelulítico.
Dime, ¿es importante el calentamiento en un masaje anticleulítico?
Importantísimo, ya que necesitamos que aumente mucho la temperatura de los tejidos para hacer la grasa más fluida, provocar una dilatación de los vasos sanguíneos y linfáticos para que permitan la evacuación de líquidos retenidos así como de las grasas que vamos a liberar durante el tratamiento.
Pero, ¿cómo será este calentamiento? ¿Debe ser pausado, con maniobras laaaaaaaaaaaargas y relajaaaaaaaaaaaaaaaaantes?
No, en absoluto, ya que buscamos un fuerte aumento de la temperatura de la piel, que es donde está la celulitis, de modo que las maniobras pausadas no nos sirven. Necesitamos maniobras muy muy rápidas, así conseguiremos un calentamiento óptimo.
¿Y haremos la misma presión que para otro tratamiento?
Tampoco, porque si queremos tratar la piel como tejido objetivo no será necesario hacer tanta presión.
Todo muy lógico, ¿verdad?
Como acabas de leer, hemos estado hablando sólo de la fase de calentamiento, pero podríamos hacer lo mismo para cada fase del tratamiento.
Y tú tienes que saber hacerlo para poder responder rápidamente a cualquier requerimiento que se te presente en cabina.
Y es que cuando tenemos lógica, cuando sabemos razonar la respuesta, no necesitamos tirar de la memoria.
Con tu lista única de maniobras no tendrás que rebuscar en tu memoria entre los diferentes masajes que se pueden hacer en piernas, porque sólo tendrás una lista de piernas.
Y como entiendes los tipos de masajes que se pueden aplicar, y entiendes a la perfección las fases que pueden componer un tratamiento, sabrás ya qué maniobras hacer, con qué presión, con qué velocidad, sabrás por qué haces más una maniobra que otra, por qué no haces determinada maniobra, por qué te vas a saltar la fase de estiramientos y vas a dedicar 10 minutos del tratamiento sólo a vaciajes.
Y como sabrás hacer todo esto, sin haber tenido que estudiar listas y listas, y te presento esta tabla, con un listado de maniobras de masaje de piernas:
Sabrás, sin mucho esfuerzo, hacer esto:
Y, ¿sabes qué es lo mejor?
Que aprender a usar la lógica te va a ahorrar muchísimo tiempo de aprendizaje, porque es mucho más fácil razonar que memorizar ya que de la primera manera las respuestas ya están en tu cabeza, mientras que memorizando las tienes que meter “a la fuerza”.
Así, póntelo fácil y elige aprender masaje de manera que tus conocimientos duren para siempre, y el instinto es lo mejor para conseguirlo.